Mi humilde homenaje

Como profesora de Educación Especial que he sido durante mis doce últimos años de profesión, quedé totalmente sorprendida por la sensibilidad que mostró el Sr. Zapatero con la joven deficiente (Síndrome de Down) que intervino en “Tengo una pregunta para Ud”. Pienso que las leyes una vez hechas están para que se cumplan y este tanto por ciento que se recoge jamás se cumple en cuestión de empleo, y los primeros que no la cumplen son el Gobierno y por supuesto, tampoco la Junta. No me ha gustado en absoluto, ni como profesional, y mucho menos como madre, que hayan querido hacer de esta joven una heroína para colgarse medallas. ¡De pena!
He tenido muchos niños con el mismo síndrome y no han tenido la suerte de poderle hacer ni ellos ni su madre (me acuerdo en estos momentos de Jonatán y su luchadora madre Paqui) ninguna pregunta al Sr. Zapatero, por eso mi pregunta para el Presidente es la siguiente ¿le pueden llevar estos chicos su currículo a la Moncloa?
No entiendo Sr. Presidente, que se mostrara Ud tan sensible, que se le movieran las fibras más sentimentales de su corazón con este problema, y que en el mismo programa admitiera el aborto, porque es un derecho de las madres. Pues gracias a esas madres que no ejercieron el derecho, que hoy como progre Ud. le ofrece, tenemos niños, cada vez menos, tan lindos y encantadores como la joven de la pregunta. Tenemos a jóvenes como nuestro malagueño Pablo Pineda y tenemos muchos otros anónimos y desconocidos que son la alegría y la bendición de sus padres.
Vaya con esta carta, mi humilde homenaje a tantas madres anónimas, madres de niños con síndrome de Down y a esos profesores llenos de amor y cariño que trabajan con ellos cada día para darle un futuro mejor, sin pensar que tengan que ir a un programa, preparado, para que se les tengan en cuenta, en una sociedad donde se están perdiendo muchos valores.
Francisca Cruzado Ríos.